top of page

Cuantas veces...

Foto del escritor: Conexión CurvyConexión Curvy

Nose por donde empezar. Pero seguramente que hablo en nombre de muchas y cuando me leáis os sentiréis identificadas.

Desde pequeña siempre he sido una chica gordita. De aquella. Si que me importaba. Porque aveces sin querer surgen momentos en los que es inevitable sentirse “desplazada” por el peso. Recuerdo en las clases de educación física, las pruebas de resistencia, saltar el potro...seguro que muchas de vosotras me entendéis y sabéis lo que os quiero decir. Muchos días que tenía educación física misteriosamente me “dolía la barriga” para no ir a clase. Que triste pienso ahora y que poco cuidado tenían con nosotros. Éramos niños y nadie tenía tacto para tratar esos momentos.

Cuando me compre el vestido de la primera comunión y me decían; “nose si tendremos talla”

Cuando pasé al instituto más de lo mismo.

Cuantas veces habéis ido de comida y comer como pitinas para que la gente no dijera: ¡mira esta no me extraña que esté como una foca!

 Cuantas veces habéis ido a comprar ropa a una tienda y os ha venido el bajón porque la prenda que te gustaba no llegaba a tu talla.

Cuantas veces habéis ido a comprar un vestido de fiesta y os han dicho, “no sé si tendremos ropa para ti”

Cuantas veces habéis ido a un restaurante de comida rápida y sentís que todo el mundo os mira como si pensaran que coméis eso todos los días.

Cuantas veces os han dicho hipócritamente ¡que gorda estás! No me digas. Que no tengo espejo en casa.

O haber ido al médico o esa gente que se cree médico y dice eso es por el peso. Que te duelen las rodillas. Es el peso. Que tienes colesterol. Es porque estás gorda. Que tienes dolor de garganta. Es porque estás gorda.

Siempre comprando ropa que disimule “¿Cómo llevas eso con esas piernas que tienes?”

Y es que la gente es muy mala.

¡¡Basta ya!! Que facilidad tenemos para opinar de la vida de los demás sin saber si esa gente tiene un complejo o un problema.

Eso en mi vida por suerte ya no me hace daño.  Y desde que estoy dentro de la familia de “conexión curvy” mucho menos, aprendí a vestirme como quiera sin dejarme influenciar por los pensamientos de los demás, porque todas tenemos derecho a ello.

He decidido tomarme las cosas de quien vienen. Y generalmente. Siempre viene de gente con maldad. Con gente que no está Agusto consigo misma. Con esto no quiero fomentar el estar todo el día comiendo comida basura ni mucho menos. Pero si tú estás Agusto contigo, deja pasar a esa gente que mira más el pensamiento de la sociedad que el interior de una persona, y como se suele decir.

Aporta o aparta. Vida hay solo una y tallas hay muchas.

Ángela Iglesias

Comments


© 2023 por Secretos de Armario. Creado con Wix.com

bottom of page